Los riñones son órganos fundamentales en la desintoxicación y depuración de nuestro organismo. A través de la orina se encargan de la eliminación de aquellas toxinas y de los diferentes desechos que nuestro cuerpo no necesita.
- Alimentos ricos en proteínas: un consumo excesivo de carne, pescado y huevos hacen trabajar en exceso a los riñones, incrementando la posibilidad de desarrollar cálculos renales.
- Consumo excesivo de sal: aunque la sal es fundamental para nuestro organismo, consumida a grandes dosis (algo que tiende a ser muy común) causa que nuestros riñones deban retener más agua para eliminarla, lo que al aumentar a su vez la presión arterial a largo plazo dañan las nefronas de los riñones.
- Bebidas con gas: conocidas también como gaseosas o refrescos con gas, pueden influir en la aparición de cálculos renales, sobretodo cuando son habitualmente consumidas.
- Lácteos: un consumo excesivo de productos lácteos y derivados pueden aumentar la eliminación de calcio a través de la orina. Esto favorecería el desarrollo de cálculos renales.
- Cafeína: al igual que los alimentos nombrados en las líneas anteriores, un consumo excesivo de cafeína se traduce en un aumento del riesgo de formación de cálculos en los riñones.
- Nota: los alimentos no se deben consumir en exceso por lo que debemos tener una dieta balanceada. Fuente: natursan.net
